El herbario es una colección científica de plantas prensadas, secas y catalogadas destinada a conocer la diversidad florística y vegetal de un lugar determinado. Contiene información taxonómica, geográfica e histórica única, que ha sido recopilada a lo largo del tiempo. En una palabra, podríamos afirmar que el herbario es un acta notarial de la diversidad de plantas existente en un lugar y momento determinados. 

Como prueba de ello, cada registro incluye un ejemplar o varios de la planta que viene acompañada de una etiqueta (su DNI y curriculum) que nos proporciona una gran cantidad de información de distinta índole. Taxonómica porque nos identifica la especie con su familia y género, información de su ubicación con georreferencia, localidad y una breve descripción del tipo de suelo, especies que le acompañan, orientación, altura etc, información que nos habla de las apetencias ecológicas de la especie. 

Entre otras cosas, esta información es crucial para el correcto entendimiento y gestión de la biodiversidad que tenemos, algo tan urgente y necesario en la actualidad dada la acelerada y desgarradora deforestación y pérdida de biodiversidad y suelo que padece el planeta. 

Los herbarios también ofrecen una función didáctica complementaria de conocimiento e identificación de especies, bien para naturalistas, estudiantes o simplemente personas interesadas por las plantas medicinales para su uso farmacológico, que en definitiva son candidatos a defensores de la naturaleza y su biodiversidad.

Los herbarios también guardan una fuente de información utilizable en el futuro por ejemplo por estudiosos del cambio climático a través de la corología comparativa con plantas de otra época, o de la contaminación de los suelos o atmosférica a través de muestras de sus raíces o tejidos, sin descartar un abanico de posibilidades que hoy no acertamos a identificar a priori , pero que quizás algún investigador con mayor conocimiento del que actualmente poseemos aproveche y agradezca al poder observar y estudiar estos testigos de lo que un día hubo.

Pero como ocurre con la ciencia en general y así reconocen muchos científicos como el catedrático de Fisiología del UPV y divulgador de ciencia José Ignacio Perez Iglesias, uno de los grandes problemas a los que se enfrentan los científicos es cómo trasmitir y hacer llegar la ciencia y el conocimiento a la sociedad. Tratándose de algo físico y muy localizado como un herbario, tal vez es más complicado todavía. La RSBAP desde su fundación hace más de 250 años tiene como lema hacer que la ciencia llegue a la ciudadanía. Conociendo este herbario y haciéndose eco de la dificultad de este insalvable escollo, tuvo la visión de solucionar el problema escaneando todos los registros, para ponerlos online a disposición de cualquier ciudadano o entidad que tenga interés en la materia, en esta plataforma ondarea.eus.

El herbario tiene hoy unos 2500 registros. Decimos hoy, porque el herbario es un ente vivo en constante evolución al que continuamente se le añaden más registros, actualizaciones, correcciones etc. Como ejemplo, los cerca de 60 nuevos pliegos que serán añadidos a la colección en breve, con su posterior escaneo etc. 

Entre los registros hay una considerable cantidad de aportaciones de plantas nuevas o raras al catálogo de la flora de Gipuzkoa, al de la Comunidad Autónoma del País Vasco e incluso alguno al de la Península Ibérica. Su catalogación informatizada se realiza de acuerdo con las normas internacionales del GBIF (global biodiversity information facility), programa que lleva nombre Herbar dentro del proyecto Elysia, y fue instalado y se mantiene gracias al apoyo del Nodo Central del GBIF en España, en Madrid, dependiente del CSIC.

De esta manera será visible para todo el mundo y pondrá en valor un recurso que ha costado tantos años de esfuerzo y que guarda una enorme cantidad de información que se pone a disposición de todos los ciudadanos. 

Colección creada por José Antonio Aperribai Gallastegi, Amigo de Número de la Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País en Gipuzkoa