Relatos del mundo de las plantas, segunda parte

Laburnum anagiroides 

El Laburno o codeso de los Alpes es un árbol nativo de las montañas de centro Europa, que según Flora Ibérica, crece entre los 800-1200m. aunque lo hemos visto y herborizado de los Alpes en La Forclaz, Suiza, a más de 1500m. y en Font Romeu, en los Pirineos franceses, a 1780 m.

Hay muy escasas citas de España donde en ocasiones se ha naturalizado como este ejemplar. Según propietarios del lugar, un antepasado suyo plantó un ejemplar en un escarpado junto a la carretera a Udala que desapareció con el desmonte realizado por la ampliación del ancho de la carretera en los años 60 del pasado siglo. Actualmente existen varios ejemplares naturalizados que provienen de aquel ejemplar desparecido. Esta planta se cultiva en parques por la vistosidad de su floración, pero sin embargo es tóxica, sobre todo sus flores y semillas, debido al alcaloide citisina.

Cynosurus elegans 

Esta elegante y delicada gramínea, muy rara en Gipuzkoa tanto que probablemente solo la podremos encontrar en esta localidad de Araotz, donde fue citada por primera vez para este territorio en 1996. Afortunadamente en esta ubicación goza de buena salud, pero dada su fragilidad, necesita protección.

Brachypodium phoenicoides 

Esta gramínea, como la anterior, es muy rara en Gipuzkoa, y que sepamos solo la podríamos encontrar en un muro de Goimendi en Bergara.

Aceras anthropophorum 

Aun sin ser tan exuberantes y vistosas como las que podemos encontrar en las selvas tropicales, en nuestros territorios también podemos encontrar orquídeas de una belleza más discreta, pero no menos bellas. Esta especie del herbario no es muy frecuente y fue hallada en Orkatzategi, Oñati. Su nombre vulgar, hombrecillos ahorcados, alude a la forma que adopta la división del labelo de su flor que se asemeja a un hombre ahorcado. 

Cytissus oromediterraneus 

Piorno. Erratza Este ejemplar procede del puerto de Peña Negra en la Sierra de Piedrahita, Ávila. En la época de su herborización, primeros días de junio, el espectáculo que ofrecen los colores de la floración del piornal que te envuelve, abarcando todo lo que puedes ver y el aroma que despiden sus flores y flota en el aire, pudiéndose percibir a muchos kilómetros, es una de las manifestaciones de la naturaleza más hermosas y bellas que se pueden presenciar y sentir.

Bougainvillea spectabilis 

Verdaderamente la buganvilla, como su nombre específico nos sugiere, es una planta que ofrece una gran belleza. Fue descrita para la ciencia en 1766 por el botánico francés Philibert Commerson que la conoció en el Perú y la dedicó al comandante de la expedición, el militar francés L. asminumjA. Bougainville a cuyas órdenes viajaba. Como se puede observar, esta buganvilla recolectada en Ribadesella, Asturias en 1981 en el proceso de herborización, con el paso de los años no ha perdido un ápice de su belleza y caracteres. 

Jasminum officinale 

Jazmin; jasmina.

Esta planta aromática propia de climas con influencia mediterránea, crece sin embargo en plena vertiente cantábrica en una ladera soleada de Aratabilla en Bergara. Su ubicación, al parecer cumple sus apetencias ecológicas pues se ha extendido por la ladera que ocupa, acompañada por la carrasquilla y la zarzaparrilla que también gustan de suelos calcáreos y soleados.

Genista hispanica 

Esta genista ocupa suelos calizos que va dejando el bosque de caducifolios que retrocede por la acción

humana, y en ocasiones forma macollas almohadilladas muy vistosas durante la floración, cuando se tupe de apretadas flores amarillas allá por los meses de abril y mayo.

Leucanthemum ircutianum 

Esta especie recolectada en Mutriku solo la podemos encontrar en los cantiles rocosos de la costa y es endémica de la cornisa cantábrica.  Como las demás “margaritas”, pertenece a la gran y compleja familia de las asteráceas o compuestas (un sinónimo de la anterior). A esta familia pertenecen todos los cardos con o sin espinas, las margaritas, la manzanilla, la milenrama, el te de roca, los crisantemos y una larguísima lista. Según Flora Ibérica del CSIC, solo en la Península figuran más de 165 géneros y en el globo superarían los 1.600 con 24.000 especies.

Ammi visnaga 

Umbelífera o Apiácea, que vive en lugares secos de influencia mediterránea, se encontró en un talud, entre un antiguo viñedo y un olivar, en sustrato de margas, en Arellano, Tierra Estella. De momento no se ha localizado en la vertiente cantábrica.

Stachys germanica 

Especie muy rara en la vertiente cantábrica. La del pliego procede de Burubiko, Antzuola, de un bosque de castaños con pronunciada pendiente y suelo volcánico, hábitat que se correspondería con el propuesto para esta especie en Flora Ibérica.

Juncus bufonius

En la naturaleza todos los seres tenemos y buscamos nuestro hábitat preferido y las plantas no son una excepción. Tanto es así que las plantas, si las conocemos un poco, muchas veces caracterizan y nos indican el tipo de hábitat donde se asientan. Este pequeño junco y toda su familia buscan suelos acuosos para asentarse con sus raíces. El ejemplar del pliego encontró el suyo junto al arroyo Errekalde en Ubera, Bergara.

Carduncellus mitissimus

Según Claves de la Flora del País Vasco, esta especie de cardo lo podemos encontrar en pastos pedregosos y matorrales despejados junto a enebros, que es el hábitat donde se encontró en Bergara, Gipuzkoa, localidad que resulta rara para esta especie que se prodiga más en zonas de influencia mediterránea, aunque también lo hemos encontrado en la solana de Udalaitz, también en Gipuzkoa. Aunque dispone de unas raíces fuertes y bien desarrolladas, su tallo aéreo es muy reducido y la planta solo desarrolla entre 3 y 15cm, por lo que este discreto cardo puede pasarnos desapercibido entre el pasto.

Phagnalon sordidum

Esta matita rupícola se prodiga en roquedos soleados y paredes, medios en los que se prodiga como una verdadera especialista. Es cosmopolita, tanto que hay citas hasta del monte Carmelo en Israel y es difícil no encontrarla en fisuras y coronaciones de viejas tapias urbanas en nuestros pueblos o ciudades.

Erophila verna

Este terófito, -como en lenguaje botánico se denomina a las plantas anuales- que culmina su completo ciclo biológico en apenas unas semanas, es una de las plantas vasculares más pequeñas que nos podemos encontrar. Germina de la semilla en pleno invierno, como su nombre específico latino “verna” indica y desaparece rápidamente, una vez cumplida su función de trasmitir y dar perpetuidad a sus genes a través de sus semillas, así como la posibilidad de vida a otras plantas.

Bromus rubens

Planta muy rara en la cuenca cantábrica de Euskadi, este ejemplar fue recolectado en el muro de un viejo puente inhabilitado al transito. Esta cita de Elorregi en Bergara, fue la primera para la mitad septentrional del territorio.

Fallopia japonica

Planta procedente de Japón y cultivada como ornamental tiene un carácter marcadamente invasivo. Para hacernos una idea de la intensidad de ese carácter, baste con decir que en Flora del País Vasco de I. Aizpuru se cita como escasa y en apenas 20 años invade ambas orillas del río Deba a lo largo de todo su cauce, cubriendo totalmente la superficie que ocupa, constituyendo una amenaza para la flora autóctona. Se han hecho vanos intentos de erradicarla o al menos controlarla sin ningún éxito, por lo que continúa sin control.

Quercus coccifera

Arbusto genuinamente mediterráneo su localización en las faldas de Udalaitz, Arrasate, constituye una rareza a proteger. Su presencia y la buena salud de los numerosos ejemplares con los que cuenta esta especie en esta ubicación y que a toda luz parecen autóctonos, nos lleva a preguntarnos cuando llegó a esta ubicación tras la última glaciación. La respuesta puede constituir una buena tesis doctoral.

Carlina corymbosa

A pesar de que este cardo, de entrada, con sus agudas espinas no invite a acercarnos a ella, las flores de esta compuesta poseen unas brácteas doradas que semejan pétalos, que ofrecen, aun tras marchitarse, un atractivo contraste con el resto de la flor. El ejemplar fue recolectado en una ladera caliza soleada entre Bergara y Antzuola, que ofrece condiciones para que las plantas con apetencias mediterráneas puedan instalarse en él, como es el caso de esta especie que no es nada corriente en la zona.

Paris quadrifolia

Esta planta la recolectamos en un pastizal bajo un crestón calizo del monte Kurutzaberri, en Aretxabaleta, un lugar que nos ofrece un espectacular paisaje de prados y montañas de un amplio entorno. Es muy escasa en todo el territorio y de ella solo llaman atención las cuatro hojas verticiladas a modo de parasol. Sus bayas tóxicas poseen una diversa variedad de saponinas de altas toxicidad, pero al parecer, según diversos estudios médicos sus saponinas actúan eficazmente contra la metástasis cancerígena.

Isatis tinctoria

Índigo. Hierba pastel, áspide de Jerusalén, añil

La abundancia de nombre populares habla de su cosmopolitismo y el motivo no es otro que el extendido cultivo y uso como colorante de tejidos, hasta el punto de que pasa por ser uno de los colorantes más antiguos y ampliamente utilizados por la humanidad. Según restos arqueológicos encontrados con semillas de esta planta en una cueva del occidente francés, su utilización vendría desde el neolítico. Modernamente, en nuestro entorno industrial de Bergara se ha utilizado ampliamente la tintura del índigo para teñir los populares pantalones vaqueros o jeans.

Sambucus racemosa

Saúco rojo

Cañón de Añisclo, Pirineos oscenses. Hoy prácticamente desaparecido en el norte de la península salvo en los pirineos. Sin embargo, según el botánico bizkaino Emilio Guinea (1907- 1985) en su Catálogo Florístico de Vizcaya (1980), cita este arbusto-árbol en el monte Gorbea.

Ranunculus gramineus

Las hojas de este ranúnculo que semejan las de una gramínea como nos informa su nombre especifico, lo diferencian del resto del genero Ranuculus, por lo que resulta sencillo de identificar. Más propio de las zonas de influencia mediterránea, su ubicación en Araotz, Oñati, en plena vertiente cantábrica, constituye toda una rareza. La población de su ubicación goza de muy buena salud y en cada primavera el lugar se cubre de flores amarillas. Su cita data de 1988 y que sepamos, sigue siendo la única o de las muy escasas en Gipuzkoa. 

Adiantum capillus-veneris

Este atractivo helecho lo podemos encontrar en lugares frescos donde el agua rezuma por los taludes no demasiado soleadas, las fuentecillas, las oquedades etc, y gusta de los suelos calizos. Se ha utilizado como planta medicinal, para combatir los catarros y en la antigüedad contra las mordeduras de las serpientes. El nombre específico capillus–veneris, por lo visto proviene del escritor romano Lucio Apuleyo, que lo utilizó para comparar los rabillos de las frondes de culantrillo de pozo, con los cabellos de la Diosa Venus. Linneo aceptó el nombre específico como bueno y hoy lo sigue siendo.

Teesdalia nudicaulis

Esta plantita anual de la familia de las crucíferas, crece sobre todo en los arenales ruderalizados de la costa, donde su pequeño tamaño no le permite destacar sobre el resto de plantas que escamotean su presencia e incluso los musgos compiten en con ella en talla. Sus flores tampoco contribuyen a ello, pues además de efímeras, son de un ínfimo tamaño que apenas sobrepasan el 1mm. La convergencia de estas características morfológicas le permite pasar totalmente desapercibida y de ahí la escasez de citas en los territorios del País Vasco. 

Acer negundo

Arce

Originario de Norteamérica que en el pasado ha sido plantado como ornamental. Según Claves de la flora del País Vasco, raramente se asilvestra junto a los ríos en los valles atlánticos. La muestra del herbario procede de un ejemplar de Capbreton, en las Landas, junto al arroyo Boudigau, probablemente asilvestrado.

Equisetum telmateia

Equiseto mayor, rabote caballo o azeribuztana.

Planta medicinal ampliamente utilizada por sus virtudes como planta diurética de comprobada eficacia, sin embargo, no es tan conocida por otras muchas propiedades, según relata algunas de ellas el recomendable libro “El Dioscorides renovado” del botánico y farmacéutico catalán Pius Font Quer. Como decíamos, además de diurético “facilita la remineralización de los organismos depauperados, sobre todo de los tuberculosos; actúa también como hemostático (para detener hemorragias originadas por varios motivos)”. Las propiedades que posee, hay que atribuírselas a varios principios activos: ácido silícico, gálico, equisético etc y sales potásicas, entre otros. Todo un laboratorio.  Otras especies parecen disponer de parecidos principios activos. 

Trifolium subterraneum

Como todos los tréboles, la alfalfa o las retamas, esta plantita pertenece a la familia de las fabáceas o leguminosas. Esta especie de trébol, crece rastrera y aplicada al suelo por lo que pasa más desapercibida que otras de su misma talla. Sus flores blancas, con su cáliz de base color bermellón que parece pintado y que nos puede ayudar a su identificación, tras ser fecundadas, se entierran en el suelo y desaparecen sin desprenderse de la planta. Esta estrategia muy particular con que la evolución ha dotado a esta especie, le sirve para asegurarse de que sus semillas lleguen a un suelo productivo con mayores posibilidades de germinar, aunque renunciando a las innegables ventajas que ofrece la dispersión como hacen la mayoría de las plantas. Y es que en la naturaleza, nada es gratuito, cualquier opción tiene un riesgo.

Narcissus pseudonarcissus

Narciso

Esta planta pertenece a la familia de las liliaceas, o amarillidaceas, sinónimo de familia a la que antes estuvo adscrita.  Tiene preferencia por los suelos calizos y nace cada año de su bulbo que permanece enterrado todo el año. Como otros congéneres suyos, gusta de vivir en los bosques caducifolios frescos o en sus proximidades y nace al final del invierno en ocasiones con suelos nevados y funde la nieve alrededor de su tallo. El motivo de adoptar este riesgo o el de las frecuentes heladas que se dan en esa época, no es otro que darse prisa en florecer antes de que los árboles se tupan de hojas que les impidan recibir la radiación solar, para obtener a través de la fotosíntesis la abundante energía que necesita la floración. Distintas especies de narcisos, heléboros, dientes de perro, la hepática, la anémone de los bosques, etc., casi todas las plantas que viven en medios nemorales, han evolucionado adaptándose a esta estrategia de adelantarse a la amenaza que supone que la sombra se apodere del bosque. En los montes de las sierras de Zaraia y Elgea, que se suponen desnudos en esa época, la floración de las distintas especies de narcisos, que comienza a finales de febrero y a lo largo de marzo cubre el suelo de distintos amarillos, ofreciendo un bello espectáculo invernal que no se puede apreciar en los valles. 

Genista tinctoria

La retama de los tintoreros o hiniesta de los tintes es una de las pocas genistas no espinosas de la península, característica que unida a su reducida talla que no sobrepasa los 50cm facilita la identificación de esta especie, escasa en el País Vasco. Su extracto viene utilizándose como colorante de tejidos desde la antigüedad. Su tintura amarilla ha sido utilizada en mezcla con la tintura azul índigo de Isatis tintoria, dos colores primarios para obtener el verde como color secundario, tal y como lo hacen hoy los pintores. También ha sido y sigue utilizándose como planta medicinal por sus virtudes como laxante, estimulante diurético y vaso constrictor. 

Maianthemum bifolium

Esta planta, como los narcisos, el cólquico, y los lirios pertenece a la familia de las liliáceas. Según Flora Ibérica es extremadamente rara en la península con solo una localidad confirmada en Gerona, motivo por el que no dispone de nombre común o vulgar, como sucede con todas las plantas que son raras o poco conocidas. La del herbario fue recolectada en el Valle d’Aosta en las montañas del Gran Paradiso, en los Alpes italianos, en prado alpino fresco, en lindero de bosque.

Laurus nobilis

Laurel; eusk. ereño, elauntza

Esta muestra del herbario fue recolectada de un enorme y vetusto ejemplar que preside una plaza de la población gipuzkoana de Mendaro, junto al río Deba. En el mundo clásico dedicaron el laurel al dios Apolo, que era símbolo de prestigio y gloria. Con laurel se coronaban los emperadores romanos y se galardonaba a los atletas vencedores en el circo. Del nombre este árbol deriva el adjetivo “laureado” que se emplea para referirse al premiado, agasajado, condecorado o al vencedor en alguna disciplina.

La presencia del laurel en amplias zonas de la península es muy antigua pues viene desde hace 55 millones de años, desde el llamado Optimo Climático del Eoceno, cuando Europa se pobló de especies paleotropicales lauroides, de las que, tras los cambios climáticos de finales del terciario y las glaciaciones del cuaternario desaparecieron casi todas, a excepción de cuatro o cinco reliquias como el laurel que aún subsisten en la península.

Persea indica

La aguacatera es un árbol que puede alcanzar hasta 40m. Originario de Centroamérica, pertenece a la familia de las lauráceas, que ha sido abundantemente cultivado por su sabroso fruto, el aguacate. El ejemplar del herbario que procede de Mutriku, muy probablemente será una variedad de cultivo como la mayor parte de los plantados en Europa, y según cuentan los más veteranos de la localidad, procede de América, desde donde lo trajo un conocido pelotari de cesta punta de Mutriku que jugaba habitualmente en los frontones de México y Florida.

Myrica gale

Arrayan bastardo

Este arbusto que crece en remansos de agua y lugares turbosos, es raro en España e inexistente en el Golfo de Bizkaia peninsular. El del herbario procede del terreno pantanoso de las orillas del Étang Noire de la localidad de Seignousse en Las Landas francesas. Las llanuras arenosas de la zona propician este tipo de hábitats, donde las aguas discurren serpenteando lentamente paralelas a la costa debido al muy escaso desnivel al muro de contención que forman las dunas. El río Adour, que hoy desemboca en Baiona, en otras épocas incluso históricas, discurría por estos parajes hacia el norte buscando una salida al mar, hasta que históricamente allá por el siglo XV, su curso fue desviado artificialmente a su actual desembocadura. La abundancia de pequeñas lagunas y balsas que existen actualmente, son restos del antiguo lecho del gran río que hoy contienen una interesante flora y fauna propia de esos humedales, como se puede comprobar en la Reserva Natural Nacional de Marais d’Orx en Labenne.

Carthamus lanatus

Los cardos pertenecen a la gran familia de las asteráceas, y aunque no todos, muchos disponen de “pinchos”, o acúleos, o aguijones como llaman los botánicos, y algunas especies en abundancia, como este ejemplar que crece en los barbechos y márgenes de cultivos de secano. Apenas dispone de un espacio sin espinas pues toda su inflorescencia, sus hojas y gran parte de su tallo están cubiertas de púas lacerantes, por lo que vulgarmente le denominan no sin razón “azota cristos.”

Carpinus betulus

Carpe

Árbol muy escaso o ausente en la península salvo en algunas zonas del norte de Nafarroa, siendo más frecuente en Francia donde los hemos visto en bosques no lejos del Loira. La muestra de este herbario procede de uno de los ejemplares de un grupo de ellos cerca del Loira, junto al Chateau de Colliers, una heredad construida por un hacendado de Zuberoa, junto a un antiguo camino de sirga (collier en francés) por el que en tiempos pasados eran arrastradas las embarcaciones que navegaban por los ríos y canales, en este caso junto al Loira.

Pistacia terebinthus

Cornicabra; vasc. ahuntzadarra.

Arbusto eminentemente mediterráneo, su presencia en la zona es rara. Sin embargo en Araotz, donde se encuentra salteado en las laderas rocosas, quizás no lo sea tanto pues las numerosas especies halladas más propias de los valles con influencia mediterránea, atestiguan la existencia de un microclima próximo a ellos. Sus tallos, las hojas, los frutos y especialmente las agallas que forman las picaduras de varios insectos en sus hojas, poseen taninos astringentes, por lo que ha sido utilizada en medicina popular.


 De su corteza se extrae la trementina de Quío utilizada desde antiguo. En la actualidad se están estudiando las propiedades antifúngicas y bacterianas que poseen los extractos acuosos de sus hojas.

Amelanchier ovalis

Guillomo.; vasc. Arangurbea. 

Este arbustillo de la familia de las rosáceas que se halla en el enclave de Araotz como la cornicabra, es una de las especies que comentábamos que era más común en los valles de influencia mediterránea y más bien rara en la vertiente cantábrica.

Tilia tomentosa

Tilo plateado. Ezkía.  

Aunque esta especie de tilo no es autóctona, este ejemplar es espontáneo y se puede considerar naturalizado. No tiene un comportamiento invasor y cumple una función ecológica pues forma parte de un bosque de ribera de los pocos con que cuenta el río Deba en Bergara y es más, de acuerdo con las nuevas corrientes se comienza a aceptar el término “ecosistemas emergentes” referido al que forman ya de hecho las plantas que no son autóctonas, sin tener en cuenta el tamiz ecológico por el que pasa con creces nuestro tilo. 

Pallenis spinosa

Estaba considerada como rara para los valles atlánticos, pero a tenor de las registradas en este herbario se puede pasar a denominar como escasa - algo frecuente. El duplicado de especies de un territorio en el mismo herbario toma sentido en estos casos, pues establece la rareza o abundancia de la especie. 

Carex divulsa

Cárices.

Esta especie y otras parecidas vistas en el campo pasan en general equivocadas por una gramínea, cuando en realidad salvo su aspecto externo, tiene poco que ver con ellas. Además de sus tallos y hojas, sus órganos de reproducción, sobre todo el femenino son totalmente distintos a los de las gramíneas.  Pertenece a la familia de las Ciperáceas, una amplísima familia a la que se le adjudica al menos más de 100 géneros y 4000 especies a nivel mundial. A decir de los especialistas en las cárices, la plasticidad morfológica y la frecuente hibridación de las especies del género Carex, hacen extremadamente compleja su determinación que obliga a una constante revisión. No siendo suficiente el estudio de su morfología, en la actualidad están en curso estudios de filogenia molecular que hagan luz en la identificación de las diversas divisiones infraespecíficas del género. Las cárices, ocupan todos los medios y están ampliamente repartidas por todo el globo. La especie que mostramos del herbario, la recolectamos en Bergara, en un herbazal ruderalizado, que de no conocerla, pasará inadvertidamente como una gramínea más.

Symphytum officinale

Consuelda mayor; zoldabelar. 

Esta planta es muy conocida por su utilización en medicina popular, tradición que deriva desde el mundo clásico. El médico y botánico griego Dioscórides que ejerció como tal en los ejércitos de Nerón, ya la cita en su famoso compendio “De Materia Médica", manual de farmacopea que ha que ha sido utilizado y traducido a todas las lenguas cultas desde el árabe en la antigüedad, hasta las modernas en la actualidad. Según el farmacéutico y botánico Font Quer, autor del moderno “El Dioscórides Renovado”, esta planta contiene entre otros compuestos químicos, resina, goma y mucílagos y también alcaloides y glucósidos ambos paralizantes del sistema nervioso central. Como dice su nombre común, consuelda, tradicionalmente se ha utilizado para soldar las heridas, pero según Quer parece ser que de las muchas virtudes que se le han atribuido la de favorecer la limpieza de las llagas es la que más garantías ofrece. Su nombre específico latino officinalis y también el de officinarum que llevan otras plantas, nos hablan de su utilización como plantas medicinales desde antiguo.

Saxifraga oppositifolia

Todas las especies que pertenecen al género Saxifraga, tienen casi solo el nombre vernáculo general de saxífraga. El nombre científico Saxifraga del latin, saxum (piedra) y frangere (romper), alude a su antiguo uso medicinal de disolver los cálculos renales.

La del herbario fue recolectada en el llamado Plateau Rossa en Cervinia en los Alpes italianos a 3.500m de altitud, pero se afirma que en los Alpes sube hasta los 4.500m. Y no solo es eso porque su capacidad de resistencia le permite ser la planta vascular que más al norte sube en el mundo, pues se ha recolectado en el norte de Groenlandia a 83º 15’. La resistencia de esta planta ha llamado la atención de investigadores que han realizado un estudio (publicado por la universidad de Oxford) de su variabilidad genética y la consecuente adaptabilidad al medio de esta especie, que le permite subsistir en estos ambientes extremos.

Senecio jacobaea

Hierba de Santiago.

Esta especie de las compuestas se denomina jacobea porque su floración viene a coincidir con la celebración de Santiago en el calendario cristiano, aunque a veces se anticipa como este ejemplar del Valle de Aosta en Italia. Como su prima hermana la S. vulgaris o cinearia, se ha utilizado en medicina popular por las mismas virtudes que ella y contiene también los mismos alcaloides más otro propio, la jacobina. Según antigua recomendación de ciertos doctores, lo más apropiado era administrar su tintura disuelta en alcohol de 70º. Desconocemos si la fórmula era efectiva para curar los males que se pretendía, pero reconocemos que sería de efectos secundarios inmediatos.

Carex paniculata

Como decíamos con otra especie de Carex, esta hierba pasa totalmente desapercibida y prueba de ello es que en España a diferencia con otros países con más tradición botánica como Francia e Inglaterra no disponen de nombre común. Entre botánicos, el nombre que se les da es cárices, que aunque parece que solo es un cultismo, no disponemos de otro mejor. Los cárices son plantas con gran éxito evolutivo y aunque abundan en medios con presencia de agua, también ocupan arenales que no retienen el agua. Es resaltable el hecho de que los rizomas de esta especie que forman fuertes y apretadas macollas que emergen del agua puedan alcanzar hasta 50 años de vida, gran longevidad para tratarse de una hierba, pero nada que ver con algunas cárices de Siberia como Carex ensifolia y Carex stans que según relatan Ana M. Molina y otros autores en un artículo publicado en la revista conservacionista Quercus. Está documentado que pueden alcanzar hasta ¡1000 años de edad¡. En el lugar donde se recolectó la muestra de este herbario en el Étang Noire de Seignosse en Las Landas, hay grandes ejemplares que merece la pena visitar.

Malcolmia triloba

Estas plantitas que apenas elevan 30 cm se encontraban en relativa abundancia en un talud arenoso de Las Hoces del Duratón, frente al Municipio de Rebolledo, Segovia, en un hábitat rodeado de enebros y carrascas. El lugar es un cañón excavado por el río Duratón a lo largo de millones de años que es un importante refugio de de aves rapaces. La Malcomia triloba es una especie mas bien escasa en la Península Ibérica e inexistente en toda la vertiente cantábrica.

Helleborus lividus sbsp corsicus

Este heléboro endémico de Córcega y Cerdeña ocupa hábitats similares a los de sus congéneres europeos. El del herbario fue recolectado en un claro de bosque de la planicie de Babella, en Córcega a 1120m. de altitud. Una rareza que aumenta el listado de los tóxicos heléboros. 

Vitex agnus-castus

El arbusto casto o sauce gatillo, es un arbusto originario exclusivamente de las costas del Mediterráneo y aunque hay citas de esta planta en el interior de la península, deben de tratarse de ejemplares escapados de cultivos.  Sus hojas despiden un aroma que recuerda a la hierba luisa, y aunque hoy pertenece a la familia de de las Lamiáceas, efectivamente en un tiempo perteneció a las Verbenáceas, familia al que también pertenece la hierba Luisa. En el pasado se ha utilizado como medicinal y cuentan que su nombre se debe a su utilización como calmante de la líbido de los monjes, como ayuda para cumplir con su celibato.

Thymus herba-barona

Tomillo de Córcega.

Las mayores poblaciones de esta especie de tomillo con distribución exclusivamente mediterránea se encuentran en Córcega y de ahí el nombre común, que no es español, haga referencia a esa isla. Mallorca, que cuenta con una sola población es la única cita existente en España. Las hojas tienen un acusado aroma que recuerda al eneldo, que incluso se deja sentir durante largo tiempo tras quitar la planta del lugar donde ha estado depositada.

Salvia verbenaca

Esta especie de salvia es un tanto rara o escasa en la vertiente cantábrica del País Vasco donde cuenta con muy pocas citas. La muestra del herbario procede de Udala en Arrasate y cuenta con una importante población que disfruta de buena salud. La planta es utilizada en medicina popular como vulneraria, digestiva y como antiinflamatoria.

Daucus carota

Zanahoria silvestre.

Este taxon es el patrón de numerosas subespecies entre las que se encuentra la más conocida de todas, la sativa, que no es ni más ni menos que la zanahoria comestible. La raíz de la planta silvestre, así como sus aromáticos frutos, son diuréticos. La raíz de la subespecie cultivada es excelente contra las anemias así como para combatir el escorbuto. También posee la sustancia colorante amarilla llamada carotina, cuyo nombre proviene del griego, carota, nombre que se utilizó asimismo para adjudicar el nombre específico científico a la planta.